La clave de la victoria fue entender la velocidad de los greens, que se humedecieron por la fuerte lluvia que forzó una suspensión de varias horas el jueves, forzando los participantes a jugar más de 18 hoyos durante viernes y sábado para recuperar el calendario original. Estas superficies fueron secándose progresivamente, hasta presentar greens de gran velocidad en la fecha final, que muchos duetos sufrieron y pagaron con golpes extras, mientras que los campeones parecieron adaptarse a la perfección.
Como suele suceder en estos casos, la suerte acompañó a los campeones y, cuando uno falló, el otro respondió con un gran golpe.
Los mexicanos no pintaron
En dos duetos latinoamericanos, Abraham Ancer, en pareja con Jhonattan Vegas (67, 70, -7), y Carlos Ortiz con el colombiano Sebastián Muñoz (71, 71, -2), quedaron fuera del corte, establecido en 8 bajo par.