Buscando los promedios de cada hoyo en los resultados de 2019 del Masters, hay una curiosa coincidencia con respecto a cuál fue el hoyo más difícil del torneo. Lo curioso es que no es un hoyo, sino dos, quienes comparten el dudoso honor del máximo grado de dificultad.
Se trata del hoyo 10, par 4 de 495 yardas, y el 18, también par 4, pero de 465 yardas. Ambos registraron un promedio por hoyo de 4.3563 golpes, con siete birdies, 49 pares, 26 bogeys y cinco doble-bogeys (+) el hoyo 10, contra cinco birdies 50 pares 28 bogeys y cuatro doble-bogeys (+) el 18.
Con 3765 yardas en par 36, la vuelta de los hoyos 1 al 9, tuvo un promedio de 36.3794 golpes, con dos águilas —una en el hoyo 2 y la otra en el hoyo 8, ambos par 5—, 136 birdies, 483 pares, 151 bogeys y solo 11 doble-bogeys o más.
La del 10 al 18 mide 3710 yardas y resultó en un promedio de 36.4941 golpes, una diferencia de +.1147 impactos con respecto a la vuelta de ida, acumulando siete águilas —cuatro en el hoyo 13— y tres en el hoyo 15, también ambos par 5—, 153 birdies, 444 pares, 154 bogeys y 25 doble bogeys o más. El campo midió 7475 yardas, y promedió 72.8735 golpes.
El torneo de Augusta presentó avances tecnológicos impresionantes. Cada golpe de cada jugador durante los cuatro días del torneo fue registrado y publicado en forma inmediata en la página del campeonato, permitiéndonos observar su trayectoria, distancia y dificultades, además del registro en video de un altísimo porcentaje de los mismos.
«La razón por la que estamos haciendo esto —comentó Fred Ridley, chairman de Augusta—, es porque siempre nos hemos comprometido con la noción de que queremos proveer a nuestros fans con contenido en la forma que ellos quieren recibirlo».