Después de un segundo día complicado por las lluvias en el Club Campestre Monterrey y, tras una larga deliberación durante las primeras horas del día, se logró reanudar la actividad del LXIII Campeonato Nacional Interclubes BBVA Bancomer, que fue suspendida el día anterior para las categorías Campeonato y AA. Sin embargo, por las condiciones del campo, las categorías A y B fueron dadas por terminadas tras finalizar únicamente dos rondas.
El equipo campeón de la Campeonato fue el Guadalajara Country Club con un total de +8, seguidos por el equipo 1 del Club Campestre Monterrey con +18, y el Yucatán Country Club con +20.
En la misma categoría, pero en la rama individual, el campeón indiscutible fue Álvaro Ortiz del Guadalajara Country Club con -11, quien con este resultado cierra su último torneo como amateur en México para convertirse en jugador profesional. Le siguieron José Dibildox Hassaf, del Club Campestre de Saltillo, con -8, y Alejandro Gutiérrez, del Club Campestre Monterrey, con -1.
Aunado a la gran competencia en todas las categorías, este torneo contó con una situación muy particular: en la categoría campeonato tres generaciones se disputaron la Copa Challenge.
Por un lado, se encontraron jugadores en la punta de su desarrollo golfístico como lo es Álvaro Ortiz, experimentado representante de nuestro país en torneos internacionales. O bien, el caso de Gabriel Ruiz y Alejandro Gutiérrez, del club sede, Campestre Monterrey, quienes dejan a un lado sus participaciones en las giras infantiles- juveniles para empezar a foguearse entre los amateurs más reconocidos del país.
Por otro lado, estaban también participando jugadores como Alejandro Fierro Sarur, que, con tan solo 12 años, ya cuenta con el nivel de juego adecuado para participar en la máxima categoría del torneo y pudo brindar a su equipo, el Yucatán Country Club, un gran juego para lograr el tercer lugar de dicha categoría.
Pero Fierro y los otros jugadores se enfrentaron a experimentados jugadores como lo es José Luis Samar, de Las Misiones Club Campestre, que aún siendo senior, le da pelea a los más jóvenes.
El Campeonato Nacional Interclubes, que por segundo año consecutivo contó con el apoyo de BBVA Bancomer, es uno de los torneos más especiales de los organizados por la Federación, pues aunado a la rivalidad natural y sana entre los clubes, logra que sucedan situaciones muy particulares como la que mencionamos.
