Relajado y contento, pero sin poder ocultar el cansancio por las trece semanas consecutivas en las que recorrió buena parte del país, con el fin de cerrar su exitosa campaña para convertirse en el candidato de unidad que sucediera a Pablo Suinaga Cárdenas como presidente del Consejo Directivo de la Federación Mexicana de Golf, Jorge Robleda accede amablemente a esta entrevista con Par 7, como lo han hecho todos los presidentes de esta institución durante los últimos quince años al momento de iniciar su administración.
Estamos a un par de horas del vuelo de regreso de la bella Cozumel, sede de la Asamblea Anual de la institución donde tomó posesión, y me pide brevedad, pues necesita platicar con los consejeros y presidentes de clubes de todo el país aún presentes, antes de la despedida. Mis preguntas son breves, pero no así sus respuestas.
A la primera pregunta: ¿Quién es Jorge Robleda Moguel?, el yucateco de origen y residencia me responde: «Mira Fernando, yo soy un entusiasta del deporte, fanático de muchas actividades deportivas. Mis orígenes en el golf se dieron en Hilton Head Island, en Carolina del Sur, donde me maravillé con ese deporte.
»Con el tiempo fui consejero y después presidente del Club de golf Yucatán, La Ceiba. Durante la administración del Ing. César Verdes, se me encomendó la creación de la Zona Sureste —Asociación de Golf del Sureste—, ya que el crecimiento exponencial de campos de golf exigía formar parte del golf federado, forjando un espacio donde hubiera orden y múltiples oportunidades para la participación de los niños. Fue una tarea difícil, pero reunimos a los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo, sin lastimar a la Zona Golfo, a la que originalmente pertenecíamos, que tenía su sede en Veracruz. Hoy, a pesar de ser la asociación benjamín del país, hemos logrado algo muy difícil: la mezcla entre una masa creciente de golfistas y una alta calidad de golf. Tenemos a una de las mejores cartas del golf amateur femenil, Isabella Fierro, así como a una buena cantidad de jóvenes y jovencitas que están dando magníficos resultados en el CNIJ (Comité Nacional Infantil-Juvenil), el organismo de la FMG encargado de la promoción y competencias de golf para las nuevas generaciones.
»Al terminar mi ejercicio como presidente de la Asociación de Golf del Sureste, el entonces presidente Jorge Kahwagi me pidió que permaneciera como consejero de la Federación y miembro del Comité Ejecutivo. Desde allí hicimos campaña para Pablo Suinaga y, cuando éste fue electo, me sorprendió nombrándome vicepresidente.
»Hoy me toca ser el sucesor de Pablo, en lo que veo como la continuidad del trabajo de un equipo al que pertenezco desde la presidencia de César Verdes, continuando con Fernando Ysita, Kahwagi y Suinaga. Cada uno ha forjado un peldaño de esta escalinata, siempre con la mira en los niños y jóvenes, porque los adultos y las damas juegan solos. El hecho de que en 2016 más de 230 niños hayan participado a nivel internacional, apoyados de diversas formas por la Federación, habla del trabajo que se está haciendo.
»El lema del plan de trabajo que utilicé durante mi campaña fue “Por el golf de los niños de México”».
Su amplia respuesta me hizo —como casi siempre me sucede en estos casos— replantear mi interrogatorio, ya que quedaron plasmadas las respuestas a preguntas que aún no había formulado. Le pregunté entonces qué lo motivaba a buscar la presidencia de la FMG, a pesar de que la institución reside en la Ciudad de México y él vive permanente en Mérida. Esto me respondió: «Después de los descalabros económicos derivados de un Campeonato Mundial con la participación de 71 países en la competencia varonil y 55 en la femenil, donde el apoyo gubernamental fue insuficiente y faltaron patrocinios, por lo que debimos recurrir a los clubes para obtener recursos, se hacía necesario que el sucesor de Suinaga fuera un promotor y no un administrador, porque en este momento no hay nada que administrar.
»Mi bagaje como promotor deportivo motivó a que un buen número de los miembros del Consejo de la Federación, y otras personas notables como Rafael Alarcón o Carlos Ortiz padre, me pidieron que considerara con seriedad la posibilidad de suceder a Pablo; ello, sumado al apoyo de mis hijas, me hizo tomar la decisión de entrarle y, una vez dentro, como un ciclón, fui a conseguir los votos más importantes; cuando mis rivales se dieron cuenta que no quedaban votos para disputar, simplemente nos pusimos de acuerdo, presentando una planilla de unidad.
»Creo que esto es benéfico para el golf. El hecho de que provenga de provincia, aunque conozca profundamente el golf del Valle de México, ayudará a que nos vaya muy bien, porque lograré unir a todas las partes, pero reconociendo siempre la valía de la inigualable aportación de los recursos del Valle de México a la Federación.
»Estoy consciente de mi gran responsabilidad, porque todos los clubes del país, y no solo los más emblemáticos, requerirán de mi presencia; y si recordamos, Fernando, que vivimos en un país presidencialista, debe quedarnos claro que no querrán ver ni al vicepresidente ni al tesorero, sino al presidente. Eso me obligará a estar viajando como loco durante los próximos tres años. Ya tengo en agenda una visita a clubes como el de Irapuato o el Malanquín (San Miguel de Allende), con quienes ya me comprometí; así seguirán surgiendo las visitas y, en la medida de mis posibilidades, voy a hacerlo.»
Le formulo mi siguiente pregunta: «¿Cómo encuentras a la FMG?»
«La organización está muy bien. El programa de Infantiles-Juveniles trabaja como relojito, hay gran confianza en Miguel Collado, de Jalapa, quien está a cargo del CNIJ, pero Selena Azcué (de la FMG) es una gran organizadora —muy profesional— quien ha adquirido una gran experiencia. Con ellos veremos la forma de hacer más rentables los torneos. Hay que tocar un par de puertas y se abren, lo que pasa es que no se tocan por comodidad, pero la Federación ya no puede aguantar el costo del crecimiento de los torneos.
»En cuanto al aspecto económico, como ya platicamos, hay una crisis de flujos, pero no me preocupa demasiado, pues he estado en contacto con gente que nos va a apoyar, todos le vamos a entrar a esto y, en muy corto plazo, la Federación tendrá recursos económicos otra vez. Ésa es, precisamente, la función que yo sé desempeñar. Para ello, es fundamental que recuperemos nuestros espacios en los medios, porque solo así recuperaremos a nuestros patrocinadores.
»Por lo pronto, tendremos un respiro con el apoyo de la CONADE; en las últimas seis semanas he tenido el privilegio de jugar en dos ocasiones con el Presidente de la República; el señor es golfista y apoyará a nuestro deporte. El primer paso ya se dio, hay 20 millones de pesos de CONADE para el golf profesional. Eso viene de la plática que tuve con él hace mes y medio y, la próxima semana, tendré una cita con personas de su equipo. Yo desde el principio le dije: “Señor, lo mío es el golf infantil y juvenil. Necesitamos recursos para que tengamos una mayor exposición de nuestros mejores jugadores infantiles.”»
Fin de la primera parte.
fdebuen@par7.mx
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