Se anunció la organización del Tour Profesional Tecate

Rory vs. Jordan

Fernando de Buen

Nada que ver con la fantochada que vimos el sábado por la noche, en la pelea entre Floyd Mayweather y Manny Pacquiao, donde el primero de ellos —a pesar de ser un boxeador excepcional— pareció tomar el papel del pajarillo del reloj de pared, que se esconde tras la puerta y solo cada 15 minutos se asoma para llamar la atención.

Lo de los mejores golfistas del planeta —el norirlandés Rory McIlroy y el estadounidense Jordan Spieth— se cuece aparte. Si bien hacen falta más duelos personales entre ellos, ha quedado claro que su preparación, dedicación y desempeño en el campo, los separan del resto.

Rory McIlroy no esperó demasiado para responderle a Jordan Spieth, tras la excepcional actuación del texano en el pasado Masters. Su triunfo en el WGC-Cadillac Championship el día de ayer, fue la prueba irrefutable de que su posición en el ranking mundial no será ninguna perita en dulce para el joven de 21 años de edad.

Con duelos así, nadie gana más que el golf.

Apenas la semana pasada, la diferencia entre el número 1 del mundo —Rory— y el número 2 —Jordan— era de 2.1363 puntos; este lunes Rory celebró su cumpleaños incrementando la ventaja a 3.5724 puntos. El norirlandés acumula 12.6246 puntos, mientras que el estadounidense promedia 9.0522. Hay un poco más de punto y medio de diferencia entre él y el sueco Henrik Stenson, quien ocupa el tercer lugar, con un promedio de 7.2504 puntos.

Desde 2014, ningún otro jugador ha tenido un desempeño comparable al de estos dos extraordinarios golfistas. Tras su victoria en el WGC-Bridgestone Invitational, en agosto pasado, McIlroy ha sumado cuatro triunfos más e igual número de segundos lugares, incluyendo triunfos en el Open Championship y el PGA Championship de 2014, el de Dubái y éste.

Jordan, por su parte, a partir de su triunfo en Australia a finales de noviembre, ganó el torneo de Tiger Woods, el Valspar Championship (PGA Tour) y el Masters, además de un par de segundos lugares, donde cayó en muerte súbita. No por otra cosa ha ascendido hasta el segundo lugar del ranking mundial.

Ante lo que está sucediendo en este duelo, no puedo dejar de recordar el que sostuvieron por años Tiger Woods y Phil Mickelson, donde el primero siempre estuvo por arriba del segundo y, cuando el zurdo tuvo la oportunidad de ascender a la cima de la montaña, desperdició un buen número de oportunidades, mismas que otros aprovecharon para tomar el primer lugar, mientras Woods preparaba uno de sus muchos regresos.

Pero aparte de Tiger, cuya capacidad, arrojo y desempeño en el campo de golf han sido incomparables en casi dos décadas, en Mickelson nunca se vio la determinación para convertirse en el mejor golfista del planeta y sostenerse allí por años.

Afortunadamente, el duelo que nos ocupa es entre dos guerreros de una casta excepcional. Ambos están ávidos de seguir ganando y no parece haber victoria alguna que pudiese frenar su ímpetu arrollador.

Lo mejor de todo, es que ya estamos en la mejor época del año golfístico, y con pocas semanas de diferencia seremos testigos de los torneos más importantes del calendario. Solo pongamos atención en lo que viene:

Esta semana se juega el Players Championship, en el TPC Sawgrass, en Florida, cuyo hoyo 17 es el par 3 más importante del mundo. Este torneo, al que muchos denominan como el «quinto major» tendrá en el field a los mejores del mundo. Cinco semanas después, del 18 al 21 de junio, en el Chamber Bay GC, se celebrará el U.S. Open. Entre el 16 y 19 de julio, los mejores estarán en el Old Course de Saint Andrews, en Escocia, donde Rory tratará de defender su título del Open; tres semanas después intentará defender también el WGC Bridgestone Invitational, en Akron, Ohio, torneo que antecede al cuarto grande del año, el PGA Championship —en Whistling Straits, Wisconsin—, también de Rory.

Por si eso fuera poco, el 27 agosto empiezan los cuatro torneos de la serie final de la Copa Fedex, que concluirán el 27 septiembre, con la final del Tour Championship, en Atlanta.

¿Por qué son importantes estos torneos en el ranking mundial? Simplemente porque debido a la fortaleza de quienes compiten en ellos, otorgan más puntos que ningún otro, y serán escenarios ideales para que cada uno de los duelistas consiga dar su mejor desempeño y altere su posición o diferencia de puntos —según sea el caso— en la tan mencionada clasificación.

Por supuesto, a todos nos encantaría ver a Tiger Woods compitiendo en su mejor nivel contra estos dos superestrellas, pero a diferencia de otros años, cuando su ausencia era más notoria que el sol en el firmamento, en la actualidad, quienes siendo niños vieron en él al modelo ideal de golfista, hoy se dan el lujo de opacarlo mediante actuaciones memorables y el establecimiento de nuevas marcas, como las que Jordan impuso recientemente en Augusta National.

Estos dos rostros —Rory y Jordan— simbolizan a la perfección el sueño de todo golfista que quiere llegar lejos en el ámbito internacional. Rory simboliza el avance europeo y su dominio sobre los Estados Unidos, reflejado en la Copa Ryder; siempre está acompañado de un carisma extraordinario, al grado que los pocos errores que ha cometido ante las cámaras, como lo fue aventar su hierro 3 al lago del Doral tras un mal golpe, no han afectado sus niveles de simpatía e imagen personal. Jordan también ha dejado atrás algunos berrinches memorables y, a pesar de su juventud, es hoy un golfista maduro, que no se desvanece tras un error. Su imagen personal es impecable, pero tendrá que trabajar con sus asesores para mejorar su carisma. Le caería de maravilla que un tipo como Rickie Fowler lo asesorara en este aspecto.

Ojalá ninguno decaiga y sigamos viendo duelos memorables en el cenit del ranking mundial.

fdebuen@par7.mx