Estamos a 10 días del inicio del primer grande del año, el Torneo de Maestros, de Augusta National. Es un buen momento para reflexionar acerca de lo que podemos esperar de este campeonato.
Con un total de 99 jugadores —número no confirmado— para esta 79ª edición, el Masters es el torneo con el field más reducido entre los cuatro grandes, y así ha sido durante años. Este número es el mayor registrado desde 1963, cuando compitieron 103 golfistas. Existe la posibilidad de que la lista ascienda a 100 pero, para ello, hará falta que un jugador que aún no esté invitado por alguna otra razón, gane el Shell Houston Open esta semana. Esa es la única posibilidad que le queda a Carlos Ortiz de participar este año.
Es importante recalcar el permanente interés y respeto de la gente del Augusta National Golf Club, por seguir abriendo espacios para jugadores amateurs en este torneo. Aparte de los dos mejores jugadores del U. S. Amateur, del ganador del Amateur Championship (British Amateur), y los campeones del U.S. Amateur Public Links y del U.S. Mid Amateur, hace unos años se organizó el Asia-Pacific Amateur Championship, y en este 2015 el Latin America Amateur Championship, con el fin de otorgar al primer lugar de estos torneos un sitio adicional. De esta forma, se conserva incólume el espíritu del fundador del torneo, Bobby Jones, por apoyar a esta área del golf.
Aunque todos los campeones del Masters tienen invitación permanente para jugar este torneo, hay una solicitud no escrita por parte de los organizadores, sugiriendo a quienes ya no conservan el nivel para competir, que se abstengan de hacerlo, aunque se les requiere para estar presentes en el evento. Aun así, es obvio que algunos de los que sí participarán, no tienen prácticamente ninguna posibilidad de ganar.
Remitiéndonos a la historia, podríamos descartar como posibles ganadores a los jugadores amateurs —nunca un aficionado ha ganado el torneo—, así como a una decena de los excampeones, cuyo nivel de competencia está muy por debajo del que tenían cuando lo ganaron.
El resto podría darnos la sorpresa.
Al igual que vimos al gran veterano Tom Watson llegar hasta el desempate en el Open británico de 2009, en Turnberry, y perder dramáticamente contra Stuart Cink, a pocos días de cumplir los 60 años de edad, también hemos visto a jugadores como Fred Couples, a quien el layout ondulado y los rapidísimos greens de este impecable campo parecen no intimidarlo, y suele obtener muy buenos resultados. Tan solo en las últimas cinco ediciones ha concluido en los lugares 6°, 15°, 12°,13° y 20°. Nada mal para este campeón de 1992, quien cuenta ya con 56 años de edad.
De los 99 jugadores confirmados, 46 son estadounidenses. Este número podría reducirse si Tiger Woods decide no participar, al igual que el año pasado, cuando faltó por primera ocasión en dos décadas. Habrá seis australianos —entre ellos el amateur Antonio Murdaca— seis ingleses, seis sudafricanos, cuatro coreanos, tres norirlandeses y tres españoles; el resto de los países participantes tendrán uno o dos jugadores.
Ahora bien, entre los golfistas que más posibilidades tienen de ganar este torneo, de acuerdo con los apostadores, están en primer lugar Rory McIlroy, cuyos momios están en un impresionante 5/1; le siguen Bubba Watson (10/1), Jordan Spieth (10/1), Jason Day (14/1), Dustin Johnson (16/1), Henrik Stenson (16/1), Adam Scott (20/1), Jimmy Walker (25/1), Phil Mickelson (25/1) y Rickie Fowler (28/1).
Entre los jugadores destacados que están fuera de estos 10 favoritos, están Sergio García (40/1), Tiger Woods (50/1), Ángel Cabrera (80/1), Victor Dubuisson (100/1), Fred Couples (125/1), Ernie Els (150/1), Miguel Ángel Jiménez (150/1), Bernhard Langer (250/1), Darren Clarke (300/1), Tom Watson (500/1) y José María Olazábal (1000/1).
Una apuesta conservadora podría quedar en favor de Rory, quien con un triunfo completaría el grand slam, pero a decir de los años recientes, es imposible descartar a Bubba, cuyo juego parece adaptarse a la perfección con el trazo de Augusta. Spieth parece listo para no sucumbir en la ronda final, ya que es ahora mucho más maduro y su juego no presenta debilidades claras. Scott ya ganó aquí.
Ahora bien, si el asunto es pegarle a la chica e intentar ganar carretadas de dinero con una apuesta discreta, yo no descartaría al francés Dubuisson, al veterano Couples, o al triple campeón de majors, Ernie Els.
Dejando atrás las especulaciones, comienza el Masters y con él, los mejores meses del calendario golfístico. Quien no esté listo para este torneo, probablemente no lo esté para pasar a la historia del 2015.
Se trata de un torneo único, inimitable, apasionante, perfecto en términos de organización, cuenta con la mejor transmisión televisiva —el menor número de pausas comerciales como condición de los organizadores— y un glamur que no tiene comparación con nada en el mundo de este deporte. En pocas palabras, imperdible.
Hagamos un espacio para disfrutar del primer grande de 2015.
fdebuen@par7.mx |
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