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El misterioso ranking mundial

(parte 2 de 2)

Fernando de Buen


La semana pasada traté muy brevemente de platicarles la historia del ranking mundial, y de cómo fue ganando confianza en los diferentes circuitos profesionales del orbe, hasta volverse un estándar aceptado por cada uno de ellos, así como referente para clasificar a muchos de los jugadores que participan en torneos de grand slam o en Campeonatos Mundiales de Golf  (WGC) y las Copas Ryder y Presidents.

Como es lógico imaginar, no puede medirse con la misma vara el reciente triunfo de Patrick Reed en el WGC-Cadillac Championship, donde compitió contra 67 jugadores clasificados entre los mejores del mundo, que el conseguido por Chesson Hadley en el Puerto Rico Open, del PGA Tour, donde no participó ni un sólo jugador entre los primeros 70 del ranking mundial. Es por eso que cada torneo es calificado en función del field y los lugares que ocupan sus integrantes en la famosa lista.

Tampoco sería justo darle el mismo valor en puntos a las actuaciones de un determinado jugador hace dos años, que las llevadas a cabo en fechas recientes.

Con el fin de buscar una fórmula que se adecue a estas condicionantes, se han venido desarrollando diversos métodos evaluativos, modificados a través de los años, hasta llegar al algoritmo que se aplica en la actualidad.

Llega entonces la pregunta inevitable: ¿cómo se determina el ranking mundial?

El método resulta menos complicado de lo que parece, una vez que entendemos el procedimiento. El desempeño de cada jugador se mide en función de los últimos dos años, donde los puntos obtenidos en torneos celebrados durante las últimas 13 semanas, pierden progresivamente su valor original, partiendo de la semana 14 hasta quedar en cero tras las restantes 91. Cada siete días se procede a contabilizar los puntos logrados por cada jugador —después de calcular la deducción mencionada—, y se promedia entre el número de torneos en los que participó en los últimos dos años, considerando un mínimo de 40 y un máximo de 52. En pocas palabras, para determinar la calidad de un jugador, no se pueden tomar en cuenta sus actuaciones anteriores a los últimos dos años y sí, en cambio, se resalta su desempeño en las últimas 13 semanas, es decir, la octava parte del periodo total.

Las giras que se toman en cuenta para el ranking son las siguientes: PGA Tour, PGA European Tour, Japan Golf Tour, PGA Tour of Australasia, Sunshine Tour, Asian Tour, Web.com Tour, European Challenge Tour, PGA Tour Canada, PGA Tour China, PGA Tour Latinoamérica, One Asia, Korean Golf Tour y el Asian Development Tour. Por supuesto, debido a las enormes diferencias por la calidad media de sus integrantes, los puntos que se otorgan a las dos primeras giras son muy superiores a las restantes. Para cualquier jugador que aspire a llegar al top-ten del ranking mundial, le resultaría imposible lograrlo si no pudiese ingresar al PGA Tour o al Tour Europeo.

Cada torneo de cada gira recibe un número determinado de puntos en función de la fortaleza del field. Mientras haya más participantes colocados entre los mejores 200 de esta lista (World Rating), más puntos se les otorgan a sus jugadores. Otra lista que influye en la cuantificación de puntos para torneos, es la del ranking local de cada gira (Home Rating), donde el número de competidores entre los 30 mejores (del año anterior), determina también una parte de la puntuación.

Esperando que esta intrincada explicación haya sido útil para aclarar algunas de sus dudas, queridos lectores, sólo me restaría mencionar que las tablas que se utilizan para determinar las puntuaciones citadas, pueden ser consultadas aquí. Asimismo, si quieren consultar cada lunes el ranking mundial de golf actualizado, sólo hace falta entrar a la página owgr.com.

Viene un mini-puente y es una muy buena oportunidad para jugar una ronda más de golf. Espero que así lo hagan y lo disfruten mucho. Por cierto, el 17 de marzo se celebra el aniversario 112 del nacimiento del mejor amateur de todos los tiempos, Bobby Jones, único ganador de los cuatro torneos de grand slam en el mismo año (1930). También un 17 de marzo, pero más de medio siglo después, nació uno de los peores amateurs de todos los tiempos, su seguro servidor. Una buena excusa para celebrar a la vida.

fdebuen@par7.mx