Para aquellos que vivimos de temas relacionados con la creatividad, el descanso por motivos vacacionales se vuelve una carga mucho más pesada de lo que uno podría pensar, ya que si bien los músculos se pueden reactivar mediante una dosis de buen ejercicio —como la pretemporada en el futbol profesional—, no conozco una rutina para regresar a las neuronas a su estado de alerta, con el fin de conseguir una mente pletórica de nuevas y valiosas ideas.
La situación se torna más difícil cuando las noticias del golf comienzan apenas a fluir, y solo se han registrado en el año dos torneos en giras importantes, el Tour Europeo y el PGA Tour.
Así las cosas, con el motor de las ideas anquilosado y pocas noticias que comentar —además de una tarde de lunes fría y algo melancólica—, el esfuerzo por conseguir una nota interesante parece titánico.
Ya en el plan desesperado por cumplir con mi obligación editorial, y estirando al máximo las cuatro neuronas disponibles en mi entelarañado cerebro, empezaré por comentar que esta campaña 2014 será más que emocionante en el PGA Tour —por la considerable cantidad de jugadores que están pasando por un gran momento—, así como en el Web.com Tour, por la gratísima invasión mexicana, que tendrá hasta siete jugadores compitiendo al menos, durante la primera parte del año. Otro mexicano, Esteban Toledo, iniciará esta semana su segunda temporada en el Champions Tour y, en caso de continuar con su magnífico desempeño durante la parte media del 2013, es seguro que nos regalará grandes satisfacciones.
Tal como mencionó el experto comentarista Johnny Miller, bien conocido por su total desparpajo para decir lo que se le ocurra sin medir las consecuencias —aunque casi siempre con apuntes bien fundamentados—, esta temporada podría marcar el final del más reciente reinado de Tiger Woods, quien acumula ya un total de 666 semanas como número 1 del mundo (ver sección Approach). A Miller le gusta Justin Rose para ocupar el puesto más codiciado del golf mundial, pero se bien el inglés es un candidato más que viable, también estamos viendo a otros con grandes posibilidades de alcanzar el cenit, entre ellos al australiano Adam Scott, al sueco Henrik Stenson o al norirlandés Rory McIlroy, a quien Miller le pronosticó un regreso estelar a las más altas esferas golfísticas.
Aunque no lo menciona la citada sección por cuestiones de espacio, el ganador del U. S. Open de 1973 le da el título de caballo negro al estadounidense Billy Horschel, basándose en sus grandes cualidades en diversas áreas del juego; a quien yo pondría ese título es al Novato del Año 2013, el texano Jordan Spieth, quien ya tuvo un muy buen comienzo en los dos primeros torneos del archipiélago hawaiano y sigue sorprendiendo a todo el mundo con una mezcla de golf excepcional y una madurez cada vez más comprobada. Con sólo 20 años edad, un triunfo y nueve top-ten en 2013, este jugador no es solo una realidad, sino uno de los más firmes candidatos para quedar entre los mejores al término de 2014.
Dejemos las cosas hasta aquí, con la esperanza de que en mi próxima participación editorial, cuente al menos con el doble de neuronas disponibles. Lo fácil no es encontrarlas, que todo el mundo sabe dónde están, sino pedirles, por favor, que ya se olviden del espectacular fin de año en el puerto de Acapulco y se pongan a trabajar con el resto del cerebro.
A todos ustedes, queridos amigos de Par 7 online, mis mejores deseos para que este 2014 esté lleno de éxitos, de alegría, de salud, de amor… ¡y de mucho golf!
fdebuen@par7.mx
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