Tour Europeo. Victoria en Sudáfrica

Otro para el Gran Danés

Par 7. Redacción

Con una sensacional vuelta de 65(–7), Thomas Björn superó el brillante ataque de Sergio García el último día del Nedbank Golf Challenge, celebrado en el Gary Player CC, en Sun City, Sudáfrica.

Dos águilas en los 9 segundos fueron la clave de la victoria del danés por dos sobre el español (autor de otro 65 no menos sensacional) y el galés Jamie Donaldson (70), con un total de 20 bajo par.

Donaldson salió el domingo liderando por tres, después de haber sido un modelo de consistencia los tres primeros días (67, 66 y 67).

Empezó con cuatro pares, y pareció cobrar impulso con birdies en el 5 y el 7, pero perdió un golpe en el 9 y se encontró empatado en cabeza con García, quien dio un recital de tiros a bandera por los 9 primeros que le valieron seis birdies.

Mientras tanto Björn les pisaba los talones con birdies en el 2, 6 y 9.

Su momento llegó en el 10 (par 5) donde fue a por todas con un perfecto golpe a una bandera casi imposible. Metió el águila y tomó la delantera. Siguió haciendo pares mientras Sergio lo alcanzó con birdies en el 14 y 15.

Björn contraatacó inmediatamente con otro tiro a bandera en el siguiente par 5, el 14. Tuvo suerte de llegar a green pasando por el bunker y supo aprovecharla metiendo el segundo águila del día desde 18 pies. En el hoyo siguiente sentencia del torneo, para sacar la bola totalmente dada, producto de un soberbio golpe.

Sergio hizo su único bogey del día en el 16 y espero en la casa club con 18 abajo.
Donaldson, incapaz de hacer un birdie desde el 8, tuvo el consuelo de meter el del 17 para empatar en segunda posición.

Björn siguió haciendo pares en el 16 y 17. Llegó al 18 con tres golpes de ventaja y terminó con bogey, sin que peligrara su victoria.

«Hoy ha sido uno de los tres mejores días de mi carrera», dijo al terminar. «La primera victoria no se olvida, tampoco me olvido de la vez que gané a Tiger en Dubái después de cuatro días codo con codo, ni me olvidaré nunca de cómo he ganado aquí ni de la calidad de mis adversarios.»
Thomas Björn