El regreso del Tigre

Fernando de Buen

Tiger Woods


Se acabaron las especulaciones. Por primera vez desde que perdió su sempiterno primer sitio en el ranking mundial de golf, Tiger Woods se enfrenta a un grupo de jugadores que en este lapso han ocupado el máximo escalafón de esta disputada clasificación. Cuando el californiano regresó a la normalidad, ocupaba un puesto por debajo de los 50 mejores del mundo. En fecha reciente ha regresado su nivel de golf, ha vuelto a los primeros sitios, domina la clasificación en el PGA Tour y ya ocupa el segundo lugar del ranking.
Pero se trata de dos años en los que han cambiado las cosas en forma importante. Quedó atrás su duelo permanente con Phil Mickelson, quien tuvo más de una decena de oportunidades de ocupar su sitio y nunca lo consiguió, o con otros estadounidenses que llegaron a ejercer un relativo acecho, pero que nunca dieron el estirón cuando había que hacerlo.

Quienes sí cumplieron con dicho cometido, fueron algunos jugadores europeos y son quienes han ocupado ese primer sitio durante todo este tiempo. Lee Westwood, de Inglaterra, fue el primer sucesor, manteniéndose por un total de 22 semanas, repartidas en dos etapas , seguido por el alemán Martin Kaymer, quien resistió ocho, después tocó el turno a Luke Donald, quien acumula 55 semanas en cuatro etapas, interrumpidas por el ascenso en tres ocasiones del norirlandés Rory McIlroy, con siete semanas totales.

El sistema para determinar la clasificación de un jugador en el ranking mundial, depende de un ciclo bienal donde el más reciente torneo sustituye al más antiguo de tal periodo. Si dos años atrás el golfista pasó por una difícil temporada, acumulando malos resultados, cualquier torneo de los que sustituyan a aquellos, con un resultado entre regular y bueno —sin la necesidad de victorias— hará que su posición suba como la espuma. Éste, precisamente, fue el caso del Woods, pero no de quienes han ocupado el cenit de la clasificación, pues ellos vienen jugando bien los dos últimos años. Es por ello que a quien ocupó por 623 semanas la parte más alta de esa lista, no le ha costado prácticamente ningún trabajo regresar; en cambio, a los otros, mantenerse les ha costado un gran esfuerzo.

Al comienzo de este 2012, Tiger apareció colocado en la posición 25, en la primera semana de marzo ascendió a 16, pero para el 25 de dicho mes ya había regresado al top-ten y se colocaba en sexto lugar. Al comenzar junio ascendió a cuarto y, al término del Open británico, llegó a su actual posición, la número 2, sólo por debajo de Donald.

Lo que viene será muy interesante. Por una parte, es muy probable que en pocas semanas, Tiger regrese al número uno, porque aún es temprano para que sus buenos resultados dejen de generarle tantos puntos. El caso de Luke es justamente el contrario, pues por estas épocas, hace dos años, ya estaba teniendo muy buenos resultados.

Pero bastarán unos cuantos meses de esta lucha sin cuartel, para que Tiger empate sus tiempos con los de sus rivales del top-ten. Será entonces cuando nos demos cuenta si Woods cuenta con las armas suficientes para seguir demostrando que es el número uno del mundo, o alguno de los europeos se encargará de echar abajo el mito. Si bien lo que queda del 2012 es temprano para que esto suceda, podemos pronosticar que el 2013 será el año más reñido de la historia en el ranking mundial.

De este gran desafío sólo puede haber dos ganadores: el golf y sus fanáticos.

fdebuen@par7.mx