El tigre dio señales de vida

Fernando de Buen

Señales de vida… ¡Vaya que las dio! Tiger reapareció con bombo y platillo en Australia, durante el mismo torneo que ganó hace dos años, su última victoria. El escándalo, las lesiones, la sensible baja de juego, el cambio de entrenador y una muy probable pérdida del ánimo, fueron los factores que dejaron al otrora súperjugador en una posición más que endeble, tanto en lo deportivo como en lo personal.

Su esperado regreso también tuvo mucho que ver con su elección muy anticipada como miembro del equipo estadounidense en la Presidents Cup, por parte del capitán Fred Couples, decisión que, por supuesto, fue muy criticada por medios de comunicación de importantes personajes del medio, como lo fue su contraparte en la escuadra Internacional, Greg Norman.
Para poder apoyar a su capitán, Tiger tenía que demostrar que ya había recuperado, al menos en parte, el nivel al que nos acostumbró durante más de una década y que lo mantuvo por mucho tiempo en un inalcanzable primer lugar del ranking mundial.

Si bien no ganó el torneo, un muy ovacionado Tiger muy cerca de conseguirlo y concluyó en tercer lugar, después de haber sido líder en las primeras dos rondas. Si bien los comentarios acerca de su recuperación no estuvieron alejados del morbo, la prensa especializada coincidió en lo afortunado que resultaría que el californiano de éste, verdaderamente, recuperado de salud y nivel de juego. No habría mejor beneficiado de que el propio golf, que necesita a un referente que vuelva a ocupar las portadas de revistas y periódicos, que hoy se dedican a otros deportes.

Esta semana, también en Australia, aun cuando se trata de competencias mayoritariamente de parejas y bajo juego por hoyos, Tiger tendrá una magnífica oportunidad de demostrarnos y está listo para ser considerado entre los grandes en el 2012. Para su fortuna, sus dos años anteriores —nefastos en resultados— son los que se toman en cuenta para determinar su sitio en la clasificación mundial; de responder desde temprano con buenos resultados, el jugador, que amaneció esta semana en el lugar 50 de esta lista, podría llegar muy rápido de regreso los primeros 10 y, en el mediano plazo, intentar su regreso al sitio que mantuvo durante 623 semanas.

Por lo pronto, y más allá de su presencia en tierras australianas para la Copa de los Presidentes, del evento por sí mismo es uno de los más emocionantes del calendario y valdrá la pena recordar algunas horas entre viernes y domingo, para ver los partidos entre los de Estados Unidos y el resto del mundo no europeo.

Perdérselo sería un grave error. Créamelo.

fdebuen@par7.mx

Su esperado regreso también tuvo mucho que ver con su elección muy anticipada como miembro del equipo estadounidense en la Presidents Cup