Su primer triunfo en el Champions Tour,
al día siguiente de la muerte de su hermana

Kenny Perry, triste primera victoria

Par 7. Redacción

Por más de un año esperó Kenny Perry el momento para alcanzar su primera victoria en el Champions Tour y la consiguió finalmente en el SAS Championship, hundido en una profunda tristeza, por la muerte, la noche anterior, de su hermana Kay, quien falleció tras una larga batalla contra el cáncer de pecho, justo dos años después de que la madre de ambos, Mildred, muriera también de cáncer.

«Cuando escuché las noticias anoche —mencionó— fue una larga noche. No dormí mucho pensando en subirme a un avión a dirigirme a casa. Pero mi papá fue enorme. Me llamó y me dijo: "Hijo, tu solo necesitas salir allá afuera y representar hoy a Kay"».

Fue en el hoyo 17, donde consiguió un águila desde 30 pies, donde logró la diferencia a su favor, cerrando con ronda de 70 (-2) y un golpe de ventaja sobre Jeff Sluman, quien firmó una tarjeta con el mismo resultado, y John Huston, quien tuvo tarjeta de 71 impactos. El total de Kenny fue de 11 bajo par, la suma más alta para un ganador en la historia del torneo celebrado en el Prestonwood Country Club. Su primer triunfo en el tour de veteranos se suma a las 14 conseguidas durante su estancia en el PGA Tour.

«Estuve muy tranquilo todo el día, sin nervios —mencionó el ganador—. Normalmente estoy un poco nervioso, algo tenso. Sentí que estaba en un bajón, muy abajo. Como deprimido y mi swing estaba en ritmo. No fue rápido y tuve gran control sobre la bola».

«Realmente no estaba pensando mucho en ganar. Solo quería hacerla sentir orgullosa y, de alguna forma, cuando la bola cayó al fondo de la copa en el 17, sentí como si ellas estuvieran mirando. Sentí que tuve ayuda allí. Emocionado por ganar, pero preferiría tener de vuelta a mi hermana.»

Kenny Perry