Ganó el WGC-Bridgestone Invitational con Steve Williams, excaddie de Tiger

Gran triunfo de Adam Scott

Par 7. Redacción

Si bien Adam Scott debe estar feliz por haber ganado uno de los más importantes torneos del calendario —el WGC-Bridgestone Invitational— quien más feliz se mostró fue su caddie Steve Williams, ex de Tiger Woods, quien calificó a esta victoria como la mejor de su vida.

Es probable que el neozelandés haya exagerado un poco, sabiendo que compartió con Tiger trece majors —algunos de una emoción difícil de igualar—, pero lo cierto es que el caddie más famoso del mundo se salió con la suya y, si bien Tiger acumula siete triunfos en este torneo, Williams ya suma ocho.

Pero la experiencia de 33 años y 145 triunfos que suma Steve fueron, sin duda, de gran ayuda para el australiano Scott, quien ganó el torneo de punta a punta. Su comienzo no pudo ser más alentador, ya que inició con un magnífico 62 que lo puso en el liderato, con apenas un golpe menos que su sorprendente paisano Jason Day. Un 70 en la segunda ronda, donde el putter no funcionó como él hubiese querido, permitió que otros lo empataran, pero se separó de nuevo en la penúltima, con un 66 que le hizo recuperar el liderato. Al salir a la ronda final, se mantuvo presionado por el japonés Ryo Ishikawa, que se mantuvo a un golpe de distancia durante toda la ronda, hasta que en el hoyo 12 un chip de Adam para birdie duplicó la diferencia, que solo aumentó durante el resto del recorrido. Adam concluyó con 65 y 17 bajo par, en el par 70 del Firestone Country Club, mientras que el nipón cayó hasta el cuarto lugar, con tarjeta de 69 y acumulado de -12. Su golf no presentó errores en los últimos 27 hoyos del certamen, en los que marcó nueve birdies. Más allá del jugoso premio económico obtenido, este resultado le permitió ascender al noveno lugar de la clasificación mundial.

Quienes registraron una muy buena actuación en la ronda final fueron el joven estadounidense Rickie Fowler, con cierre de 66 golpes, misma puntuación lograda por el número uno del mundo, el inglés Luke Donald, compartiendo ambos el segundo lugar del torneo.

Con respecto a Tiger, éste no tuvo una gran actuación, aunque tuvo destellos de la grandeza a la que nos acostumbró durante tantos años; inició con un prometedor 68, pero continuó con 71, 72 y 70, para concluir el torneo con 281 impactos, 1 sobre par.

«He sido caddie durante 33 años —145 victorias ahora— y esta es la mejor que he tenido.»

Steve Williams