Olin Browne logró su primer triunfo:
el U. S. Senior Open

Tres décadas de espera

que valieron la pena

Par 7. Redacción

Fueron 33 años esperando una victoria, pero ésta llegó en forma gloriosa, en el torneo para veteranos más importante del mundo, el U. S. Senior Open. Olin Browne se quitó ese gran peso de encima jugando un golf de clase mundial, que le permitió dominar el torneo de puna a punta, alcanzar 15 bajo par y levantar su primer trofeo desde que ingresó al PGA Tour.

Sin duda, su acercamiento con el tan anhelado primer triunfo lo presionó en la ronda final, y los números son clara muestra de ello. Mientras que en los primeros tres recorridos consiguió colocarse en 15 bajo par (64, 69 y 65), con no menos de 12 greens en regulación y no más de 28 putts por ronda, en la final solo atinó a siete fairways y requirió de 32 putts para cerrar con 71 —par de campo— y completar la hazaña. Durante el recorrido final, tuvo par en todos los hoyos, excepto en el 8, par 5, donde salió con bogey y en el hoyo final, donde culminó la hazaña embocando un impresionante putt desde 28 pies para birdie.

Mark O´Meara, quién cuenta ya con triunfos en el Masters, British Open y más recientemente en el Senior Players Championship del año pasado, su primer grande en el circuito de mayores de 50, comenzó a dos golpes de Ollin y llegó a alcanzarlo en un par de ocasiones, pero nunca pudo rebasarlo. Terminó con 72, a tres golpes de Browne.
En tercer lugar concluyó Mark Calcavecchia, el único jugador con cuatro rondas por debajo de los 70 golpes, habiendo tirado 68, 67, 69 y 69, 11 bajo par.

Hale Irwin, de 66 años y tres veces campeón del U. S. Open, logró la hazaña de tirar su edad en la tercera ronda, sumando en total 10 bajo par, con lo que empató el cuarto sitio con Joey Sindelair.

«No creo que importe cómo ganes. No creo que importe si tú tiras 63 viniendo de atrásy tiras 75 después de tener seis golpes de ventaja. Pero ciertamente es muy difícil y pienso que será un golpe de confianza para mí saber que puedo resistir cuando no traigo mi juego, y es seguro que no lo traje hoy.»

Olin Browne