Tiger Woods y Steve Williams |
«Quiero expresar mi más profunda gratitud a Stevie por toda su ayuda, pero creo que es tiempo de un cambio… Stevie es un caddie sobresaliente y un amigo, y ha sido esencial en muchos de mis logros. Le deseo un gran éxito en el futuro». Así fue como Tiger Woods se despidió oficialmente de su caddie de doce años y trece triunfos en torneos majors, el neozelandés Steve Williams.
El caddie, fiel a su recio carácter cuando defendió a su patrón de fotógrafos inoportunos y público que desconocía los cánones de comportamiento en el campo de golf, reaccionó diciendo: «Entiendo que es parte del juego… Despedirme tras el haberme mantenido increíblemente leal (a él) en el tiempo más difícil de su vida, para que después decida que necesita un cambio, creo que el momento fue muy pobre».
Así terminó una de las más importantes relaciones golfista-caddie de los últimos años, y queda por averiguar quién será el próximo asistente de Woods en el campo de golf —suena el famoso Tony Navarro—, mientras que todo parece indicar que Williams ya encontró acomodo con el australiano Adam Scott, quien parece resurgir de un letargo que lo mantuvo por debajo de las expectativas que causó en sus primeros años.
De sus mejores años como jugador, a Tiger solo le queda su representante Mark Steinberg, pues ya dejó atrás a patrocinadores, a la compañía a la que pertenecían él y su agente, a su esposa Ellin y, sobre todo, a su nivel de juego. Por el bien del golf, ojalá regrese como un triunfador. |
